Además, gran parte de las tareas cada vez más complejas ya no pueden ser ejecutadas por humanos. Por ejemplo, la automatización puede mejorar la seguridad y la ergonomía de los trabajadores. Hay muchas tareas del proceso de entrega de paquetes que pueden resultar inseguras para el ser humano, por ejemplo, el contacto con materiales peligrosos durante la carga y descarga. Por otro lado, la capacidad de identificar y procesar de forma precisa y automática datos como códigos, caracteres, pesos, dimensiones, tipo de paquete y riesgo de material resulta esencial para aplicaciones clave como la captura de datos, la clasificación, la inspección, la recuperación de ingresos, las devoluciones, la optimización del flete y la capacidad de realizar un seguimiento del paquete a lo largo de todo su trayecto desde el expedidor hasta el cliente. Las soluciones de automatización inteligentes garantizan la recopilación de petabytes de información correcta, algo que los humanos no pueden procesar.